El arte de Yayoi Kusama no deja indiferente, cautiva y atrapa al espectador.

Su arte también ha sido objeto de especial atención por la capacidad que posee de crear una perfecta mezcla entre la fantasía y la realidad, por la dualidad casi innata que poseen sus creaciones.

Yayoi Kusama nació en Japón en el año 1929 y ya, desde muy joven, mostró interés por las actividades creativas.

Sin embargo, las condiciones sociales de la época y la ausencia de apoyo de su familia dificultaron que pudiera adentrarse de forma libre en el mundo artístico.

Fue posteriormente, en 1957, cuando decide embarcarse rumbo a Nueva York para dar rienda suelta a su espí­ritu creativo.

Entre los años 1957 y 1973, Kusama explora diversas expresiones artísticas y se convierte en una creadora reconocida por su innovación y por su sorprendente manejo del color.

Muchas de las obras que la artista crea en este periodo de tiempo se centran en la realización de performances, happening y obras relacionadas con la moda y las acciones antibelicistas.

La artista también ha llegado a incursionar en el mundo de la cinematografía. Así surgió la pelí­cula Kusama: Self Obliteration.

Esta producción, dirigida por Jud Yalkut y producida y protagonizada por ella misma, llegó a recibir algunos galardones en el Segundo Festival de Cine de Maryland, en la Cuarta Competencia Internacional de Cine Experimental de Bélgica y obtuvo la segunda posición en el Festival de Cine de Ann Arbor que se celebra de forma anual desde su fundación en el año 1963.

La obra de Yayoi Kusama también permite contemplar una forma de liberación o de catarsis. El arte fue, de cierta manera, una forma de lidiar con los problemas de salud mental que la afectaban.

Una de las obras más peculiares de Kusama fue presentada en el año 1966 en un jardín del Bienal de Venecia.

La obra, llamada Jardín de Narcisos, busca llamar la atención sobre el narcisismo humano y estaba conformada por 1500 esferas de espejo elaboradas con plástico que reflejaban todo a su alrededor.

De esta forma, los espectadores contemplaban una obra llena de reflejos que buscaba que ellos mismos se sintieran de cierta forma como Narciso.

Por si fuera poco, Kusama decide vender las esferas por dos dólares con la inscripción "Your Narcissium For Sale". Con ello logró realizar una crítica al mercado del arte y además consiguió que los espectadores pudieran llevarse una parte de su obra artí­stica (Brudke, 2020).

A partir de esta exposición, Kusama comenzó a establecer diversas exhibiciones e instalaciones en espacios exteriores.

En el año 1973, Kusama decide volver a su país natal. Regresa entonces a Japón y decide internarse de forma voluntaria en el hospital psiquiátrico Seiwa en la ciudad de Tokio.

Desde entonces ha vivido en este hospital debido a diversos trastornos nerviosos y a las alucinaciones que ha tenido desde la niñez.

Sin embargo, la artista sigue cada día dedicándose a su labor creativa en su estudio de arte que se encuentra cruzando la calle desde el hospital.

Yayoi Kusama ha continuado creando y desde el año 2017 cuenta con su propio museo, el Museo Yayoi Kusama en el barrio Shinjuku-ku de Tokio, en donde se exponen sus obras y sus exhibiciones en espacios que acaban formando parte propia de las creaciones de Kusama.

Además, su arte ha llamado la atención de muchos debido al uso tan singular de los colores y de los puntos o lunares, un elemento casi insignia de las obras artísticas de Yayoi Kusama.

Por su parte, el documental de la cineasta Heather Lenz, Kusama: Infinity, ahonda en la vida de Yayoi Kusama y recorre la incesante obra de la artista.

Este documental fue estrenado en el año 2018 en el Festival de Cine de Sundance y permite contemplar diversas aristas de la vida de Kusama y posibilita recorrer su camino artí­stico desde sus primeros años hasta el reconocimiento artístico internacional que finalmente recibió.

Entre las obras y exposiciones de Kusama es posible mencionar Infinity Mirror Room (1965), Pumpkin (1983), Dandelions (1985), Watching the Sea (1989), All the eternal love I have for the pumpkins (2016), Flower Obsession (2017), Flowers that speak all about my heart given to sky (2018). Yayoi Kusama también ha escrito historias cortas, novelas y poesía.

Así­ la artista Yayoi Kusama sigue incansablemente creando piezas de arte a sus 91 años y continúa asombrando con la increíle originalidad y el alto grado de expresión artística de sus obras.

Fuentes citadas:

Brudke, A. (2020). Jardín de narcisos: Tu narcisismo en venta. Recuperado de https://historia-arte.com/obras/jardin-de-narcisos


Imagen de Tracey Wong en Pixabay

Añadir Comentario